Cirque du Soleil: De Canada Para El Mundo
Producción de espectáculos circenses de alto nivel artístico y técnico.
Cirque du Soleil es una empresa de entretenimiento canadiense que se dedica a la producción de espectáculos circenses de alto nivel artístico y técnico. Su origen se remonta a 1974, cuando Gilles Ste-Croix, un joven artista callejero, asumió la dirección de un albergue cultural en Baie-Saint-Paul, una pequeña ciudad de Quebec. Allí conoció a Guy Laliberté, otro artista callejero que tocaba el acordeón y tragaba fuego. Juntos formaron un grupo llamado Les Échassiers de Baie-Saint-Paul (Los caminantes sobre zancos de Baie-Saint-Paul), que realizaba espectáculos de malabarismo, danza, música y teatro en las calles y festivales de la región. En 1984, con motivo del 450 aniversario del descubrimiento de Canadá por Jacques Cartier, el gobierno provincial les otorgó una subvención para crear un espectáculo circense que recorriera la provincia. Así nació Cirque du Soleil (Circo del Sol), un nombre que evocaba la juventud, la energía y la fuerza de los artistas. El primer espectáculo se llamó Le Grand Tour du Cirque du Soleil (La gran gira del Cirque du Soleil) y se presentó bajo una carpa para 800 personas. El espectáculo combinaba elementos tradicionales del circo, como acrobacias, trapecio y payasos, con una estética moderna, una música original y una historia que unía los números. El éxito fue tal que el grupo decidió continuar su aventura y llevar su arte a otras partes del mundo.
En 1987, Cirque du Soleil debutó en Estados Unidos con el espectáculo We Reinvent the Circus (Reinventamos el circo), que causó sensación en el Festival de Los Ángeles. El público y la crítica quedaron impresionados por el estilo único e innovador del Cirque, que rompía con los clichés del circo convencional. El espectáculo no tenía animales ni estrellas, sino que daba protagonismo a los artistas como creadores y expresión a sus emociones y personalidades. Además, el espectáculo tenía una escenografía cuidada, un vestuario colorido y extravagante, una iluminación sofisticada y una interacción con el público que lo hacía partícipe de la magia. A partir de entonces, Cirque du Soleil inició una expansión internacional que lo llevó a Europa, Asia, Oceanía y América Latina. Cada año creaba un nuevo espectáculo con un tema diferente, inspirado en diversas culturas, mitologías, historias o sueños. Algunos de los espectáculos más famosos son: Nouvelle Expérience (1990), Saltimbanco (1992), Alegria (1994), Quidam (1996), O (1998), Dralion (1999), Varekai (2002), Kà (2004), Zumanity (2005), Love (2006), Kooza (2007), Zarkana (2011) y Kurios (2014). Cada espectáculo contaba con un equipo creativo multidisciplinario que diseñaba la música, el vestuario, la escenografía, el maquillaje, los efectos especiales y la coreografía. Además, cada espectáculo contaba con un elenco internacional de artistas provenientes de diversas disciplinas como el circo, la danza, el teatro, la música o el deporte.
Cirque du Soleil también se diversificó en otros ámbitos como el cine, la televisión, los eventos especiales o las acciones sociales. Entre sus proyectos más destacados se encuentran: el documental A Baroque Odyssey (1994), que narra los diez primeros años del Cirque; la película Alegría: The Movie (1999), basada en el espectáculo homónimo; la serie Solstrom (2003), que muestra diferentes números circenses en escenarios naturales; el evento One Night for One Drop (2013-2020), que recauda fondos para el acceso al agua potable; o el programa Cirque du Monde (1995-actualidad), que ofrece talleres de circo social a jóvenes en situación de riesgo. Cirque du Soleil se ha convertido en un referente mundial del entretenimiento y la cultura, con más de 40 espectáculos realizados en más de 300 ciudades y vistos por más de 200 millones de personas. La compañía ha recibido numerosos premios y reconocimientos, como el Rose d’Or, el Bambi, el Drama Desk, el Gemini, el Emmy o las estrellas en los paseos de la fama de Hollywood y Canadá. Sin embargo, también ha enfrentado desafíos y dificultades, como la crisis financiera de 2008, la muerte de algunos artistas en escena, las demandas legales o la pandemia de COVID-19, que la obligó a suspender sus espectáculos y a declararse en bancarrota en 2020. A pesar de todo, Cirque du Soleil ha demostrado su capacidad de resiliencia y creatividad, y ha anunciado su regreso a los escenarios en 2021 con nuevos proyectos y alianzas.